Delfín

Delfín estuvo a punto de coronar un 2017 inolvidable pero aflojó en el remate final

Delfín consiguió clasificarse por primera vez a la Copa Libertadores

Delfín estuvo a punto de coronar un 2017 inolvidable pero aflojó en el remate final

El año de Delfín fue tremendo, sorprendió a propios y extraño, pues si bien había conformado un equipo para mantenerse firme en la categoría, no pensaron llegar tan lejos y estar a punto de proclamarse campeones del Ecuador.

La primera Etapa del Cetáceo fue brillante, con el pasar de los partidos consolidaba su forma de jugar y los resultados empezaban a darse.

Cada que el cuadro mantense saltaba a cualquier cancha, era un rival de respeto incluso marcando una extensa racha de partidos invicto.

El cuadro de Guayaquil City (que en ese entonces aún era River Ecuador) fue el equipo que terminó con la racha del elenco Cetáceo, derrotándolo por la mínima diferencia y poniendo fin a la seguidilla de 21 partidos sin perder, justo cuando estaba por concluir la Primera Etapa.

A pesar de aquello, Delfín se llevó la Etapa y se clasificó por primera vez en su historia a la Copa Libertadores. Además se ganó su lugar en la gran final del Campeonato Ecuatoriano 2017.

En la Segunda Etapa el cuadro dirigido por el entrenador Guillermo Sanguinetti aflojó un poco y su juego ya no fue el mismo. A pesar de ser un rival difícil, era vulnerable y por supuestos equipos como Emelec, El Nacional y Macará crecieron en su nivel y se lo complicaron más.

A pesar de dar pelea, finalmente no pudo quedarse con esta Etapa y consagrase como Campeón de forma directa y se mediría a Emelec en la gran final.

Ya en estos partidos de ida y vuelta, El Cetáceo fue superado por el cuadro Eléctrico en ambos partidos y tuvo que conformarse con el vice campeonato.

Sin embargo, el 2017 fue un estupendo año para esta institución, que rompió el molde de los clubes tradicionales, que siempre buscan con coronarse campeones.

Nadie olvidará los nombres de varios de sus jugadores, entre ellos Roberto La Tuca Ordóñez, que se convirtió en un verdadero símbolo del equipo.

De seguro, el 2018 será un mejor año para Delfín y buscará seguir dejando huella en la historia, tanto del balompié ecuatoriano como a nivel internacional.

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