Tras la polémica que se situó por las declaraciones de Arroyo, el dirigente de Liga, Diego Castro, aclaró la situación
La polémica se instaló en el Campeonato Ecuatoriano, tras unas declaraciones de Michael Arroyo sobre ciertos rumores que apuntaban a la situación contractual que tuvo Hernán Barcos al final de su etapa con Liga de Quito.
Al respecto, los dirigentes Azucenas se pronunciaron, específicamente Diego Castro. Él mencionó a una radio capitalina que “hasta el último partido que jugó, Barcos estaba perfectamente inscrito y habilitado en FEF para jugar con Liga”.
“El contrato de Barcos estaba vigente hasta el 31 de diciembre del 2018, con una cláusula de rescisión que vencía el 30 de junio y que no se hizo efectiva; por lo tanto el contrato se mantenía vigente. Luego, el 10 de julio, de mutuo acuerdo, rescindimos el contrato por pedido del jugador” enfatizó el dirigente Albo para poner fin al tema.