Eliminación de Alemania por culpa del exceso de videojuegos
Alemania, ese ogro que se alimenta de gloria, se vio engullido por la maldición del campeón ante Corea del Sur hace ya más de una semana. Un batacazo, el de la todavía vigente campeona del mundo, que inundó las portadas de los medios de todo el mundo y que todavía colea.
Si caes por primera vez en tu laureada historia a las primeras de cambio en un Mundial, no es causa del azar o la casualidad. Ya no fue el qué, sino el cómo. Los motivos aún están por escudriñar y, por ello, Joachim Löw, hombre concienzudo y metódico, se tomó un dilatado periodo de reflexión antes de informar sobre su continuidad a la Federación Alemana de Fútbol (DFB). El vínculo que une al técnico con la Maanschaft se extiende hasta 2022.
Löw no deja nada al azar y quería entender qué salió mal y por qué en la estancia de la selección alemana en Rusia. Una de las preguntas que se hace el propio seleccionador es si el nivel de concentración de los jugadores germanos era el adecuado para la exigencia de un Mundial. En Rusia no había un equipo, sino un grupo de personas, se afirma desde el núcleo duro de la cuatro veces campeona del Mundo.
En el contexto descrito, Oliver Bierhoff, mánager del combinado teutón y voz autorizada, admitió que «muchos jugadores se retrajeron en sí mismos…». ¿Hasta el punto de preferir los videojuegos a la realidad?
Según Bild, muchos jugadores alemanes extendían sus noches de partidas a la PlayStation hasta altas horas de la madrugada. Bierhoff y Löw, desconcertados, incluso habrían llegado a tomar la medida de apagar Internet para evitar que los jugadores se conectaran y se retaran de una habitación a otra o con sus amigos en Alemania. Así, invertían su tiempo libre en el FIFA 18 o el Call of Duty, en lugar de tratar de formar grupo, cualidad que marca la diferencia para alzar dicho un torneo de estas características. El periódico Welt, que va más lejos, habla de «niños de vacaciones en pijama, más que profesionales y adultos en una misión para lograr un título».
Fuente: AS